Reseña: Los fuegos de otoño

Título: Los fuegos de otoño

Título original: Les Feux de l'automne

Autora: Irène Némirovsky

Editorial: Salamandra

Fecha de publicación: 28/05/2020

Saga: -

Páginas: 256

Precio: 18,00 €

Sinopsis:

Obra cumbre de Irène Némirovsky y baluarte literario contra el fanatismo y la intolerancia, Suite francesacautivó al mundo con su retrato inmisericorde de la sociedad francesa de entreguerras. En Los fuegos de otoño, Némirovsky compone de nuevo un sensacional fresco narrativo del envilecimiento de la burguesía parisina durante ese período vertiginoso. Escrita en la primavera de 1942, al mismo tiempo que Suite francesa y pocos meses antes de la muerte de la autora, y publicada a título póstumo en 1957, Los fuegos de otoño sobrevivió milagrosamente a los estragos del nazismo, y el reciente descubrimiento de una copia de la novela con abundantes correcciones de la propia Némirovsky le confiere un valor adicional incalculable.

Finalizada la Primera Guerra Mundial, Bernard Jacquelain regresa de las trincheras con una medalla, pero desilusionado ante la falta de perspectivas. Tras los horrores presenciados en el frente, lucha por hacerse un hueco en el mundillo de los negocios turbios que campan a sus anchas en París. ¿Qué puede atraer a la bella y sensata Thérèse del rebelde y un tanto desvergonzado Bernard? A pesar de los desengaños y sufrimientos que puede acarrearle esa relación, Thérèse lo quiere y confía en que la fuerza del amor acabe por imponerse. Durante diez años, gracias al dinero fácil, ambos disfrutan de los mediocres placeres de la vida burguesa, pero cuando los tambores de guerra vuelven a sonar con fuerza y el futuro se torna incierto, todo empieza a desmoronarse.

Ambientada en el París febril y disoluto de entreguerras, Los fuegos de otoño es no sólo un retrato íntimo de unos hombres y mujeres en busca de una libertad imposible, sino también una semblanza implacable y sobrecogedora de una clase social presa de sus privilegios y costumbres.

Opinión personal:

Llevaba mucho tiempo queriendo leer a Irène Némirovsky, puesto que es una autora que me han recomendado durante estos años, sobre todo porque me gustan estas obras que se desarrollan entreguerras, por lo que tenía pendientes varias de sus novelas. Por ese motivo, cuando vi que la editorial Salamandra iba a publicar Los fuegos de otoño, una novela que reflexiona sobre el fanatismo y la intolerancia, más actual de lo que nos gustaría, y que se desarrolla entreguerras, tenía claro que era la oportunidad perfecta para iniciarme con la autora de una vez por todas. 

Después del fin de la Primera Guerra Mundial, Bernard regresa siendo un héroe, ya que ha pasado de ser un adolescente que partió voluntariamente a la guerra a un hombre marcado por ella, encontrándose un tanto desubicado en París, donde solo tendrá que ganarse la vida con negocios turbios. Aunque siente que la ciudad no le depara un futuro esperanzador, Thérèse, una atractiva e inteligente muchacha, se convertirá en todo lo que necesita, viviendo una vida de burgueses con lo que gana en sus negocios turbios. Sin embargo, tras una década de felicidad, la guerra volverá a golpear la vida de la pareja y su brillante presente comienza a resquebrajarse. ¿Qué será de Thérèse y Bernard cuando la guerra vuelva de nuevo a París y la oscuridad se apodere de todo? 

Aunque por su sinopsis puede parecer que el libro se desarrolla únicamente después de la primera gran guerra, lo cierto es que se desarrolla en tres décadas, yendo desde los años diez hasta que comienza la Segunda Guerra Mundial, situándonos en cada una de esas etapas y viviendo con los protagonistas los acontecimientos de la época, ubicándonos en una París muy diferente a la actual. Desde 1912 a 1941 seguimos la vida de la pareja, que aunque son bien diferentes, se ganan la vida como buenamente pueden, aunque ello conlleve formar parte de negocios turbios, pero Bernard tiene claro que, después de todo lo que ha vivido en la guerra, solo quiere tener una buena vida, tenga el precio que tenga. Estamos ante un libro que no es demasiado extenso, por lo que aunque se nos cuenten determinados aspectos políticos o sociales de las distintas décadas, no se hace pesada, a la vez que la autora hace que nos interese la vida cotidiana de sus personajes, finalizando con el inicio de una nueva guerra. Precisamente ese ha sido uno de los aspectos que más me ha gustado, y es que Irène Némirovsky tiene una prosa con la que me ha ganado, gracias a la que consigue situarnos en un París que ella misma vivió y en una guerra en la que fue víctima, ya que murió en el campo de concentración más conocido del nazismo, Auschwitz. También me ha encantado cómo se nos muestra a qué puede llevar la intolerancia y el fanatismo, y viendo la situación actual y el resurgir de la extrema derecha y el auge del odio hacia lo diferente o extraño, es una lectura de la que podemos trasladar muchas reflexiones y sensaciones a la realidad actual. 

En resumen, Los fuegos de otoño ha sido un buen primer acercamiento a esta autora, conociendo gracias a su pareja de protagonistas cómo fue la vida en París durante tres décadas y momentos históricos tan importantes y oscuros como las dos guerras mundiales. 

3,5/5