Reseña: Las brujas de San Petersburgo

Título: Las brujas de San Petersburgo

Título original: The Witches of St. Petersburg

Autora: Imogen Edwards-Jones

Editorial: Ediciones B

Fecha de publicación: 04/04/2019

Saga: -

Páginas: 432

Precio: 19,90 €

Sinopsis:

Militza y Stana, hijas del empobrecido rey de Montenegro, se ven forzadas a casarse con dos miembros de la aristocracia rusa para que su padre pueda recuperar parte de su poder.

La vida, a pesar del esplendor de la corte del zar Nicolás, no es fácil. Una de ellas, Militza, parece tener poderes ocultos y siente fascinación por todo lo que tenga que ver con la magia y el espiritismo. Ante una influenciable zarina Alexandra, que haría cualquier cosa para darle al país el heredero que está esperando, despliegan su relación con el más allá, y entre sesiones de espiritismo, pócimas engañosas y coqueteos con la magia negra, logran hacerse con un gran poder en la corte.

Sin embargo, cuando den con Rasputín, precisamente en la búsqueda de un hombre con poder espiritual, descubrirán que quizás han ido demasiado lejos.

Opinión personal:

Aunque no he leído ni visto demasiado sobre la Rusia zarista, es una época histórica que me encanta ver y leer, por lo que cuando vi la publicación de este libro por parte de Ediciones B, que además incluía elementos mágicos y teniendo a dos Romanov como protagonistas, supe que tenía que ser mío, a pesar de que no contaba con demasiadas críticas positivas. Aun así, quise darle una oportunidad para descubrir por mí mismo qué me parecía y tener una opinión propia y con fundamento, sin dejarme llevar demasiado por las críticas y puntuaciones. 

Militza y Stana son hijas del rey de Montenegro, totalmente empobrecido y con cada vez menos poder, siendo forzadas a casarse con dos miembros de la alta aristocracia de Rusia para devolver el poder y estatus de su familia. En la corte del zar Nicolás, descubrirán que entre riquezas la vida tampoco es demasiado fácil, descubriendo Militza poderes que está desarrollando y bajo la influencia de la zarina Alexandra. Cuando Rasputín aparezca en sus vidas, descubrirán que quizá han sobrepasado demasiado determinados límites. 

Aunque las dos hijas del rey son bastante importantes en esta historia, sí que es cierto que Militza acaba teniendo un mayor protagonismo, sobre todo por el tema de la magia oscura que tiene importancia en el mismo, además de que me ha parecido un personaje inteligente. Nos encontramos con dos personajes principales que nos mostrarán lo que era ser una mujer de la aristocracia en una época tan importante como la que se trata en esta historia. Además de ellas, también conoceremos a otros personajes históricos muy importantes, aunque la autora se tome algunas licencias, algo que es normal teniendo en cuenta que hay parte de ficción en él. 

Sin embargo, tengo que señalar que me han parecido, en general, unos personajes a los que les faltaba profundidad y en los que me hubiera gustado ver más desarrollo, lo que ha provocado que no disfrutase tanto con esta historia. Es una pena porque esta historia podría haber sido mucho mejor y prometía una gran lectura que al final no ha podido ser. 

De esta forma, unido a la poca profundidad y desarrollo de sus personajes, hay que añadir que el ritmo es bastante repetitivo y monótono, y hay ocasiones en las que la lectura se hace pesada y bastante repetitiva, lo que ha provocado que estuviera varias veces tentado a abandonar su lectura. No obstante, como quería descubrir más de esta historia y de la magia oscura en la corte zarista, decidí seguir leyéndolo hasta el final, aunque finalmente no terminara de encaminar su rumbo y no fuera lo que esperaba. Lo que sí me ha gustado ha sido ver cómo iba decayendo la importancia del sistema del zar y cómo las protagonistas mueven hilos para intentar devolver el poder perdido a su familia. 

En resumen, Las brujas de San Petersburgo ha sido un libro que no ha terminado de convencerme, pero sí que he disfrutado de conocer la magia oscura de esta historia y determinados aspectos de una época que cada vez me gusta más.

2/5