Reseña: Voz

Título: Voz

Título original: Vox

Autora: Christina Dalcher

Editorial: Roca

Fecha de publicación: 07/02/2019

Saga: -

Páginas: 352

Precio: 19,90 €

Sinopsis:

Cien al día. Ni una más. Esa es la cifra de palabras que la neurolingüista Jean McClellan y el resto de mujeres tienen derecho a pronunciar cada día. Una sola palabra por encima de esa cifra y cientos de voltios de electricidad recorrerán las venas de cualquier mujer que se atreva a sobrepasarla. Ese es el mandato del nuevo gobierno. Las mujeres no pueden escribir, los libros les han sido prohibidos, sus cuentas bancarias han sido transferidas al hombre de la familia más cercano y se han suprimido todos los empleos para las mujeres.

Pero cuando el hermano del presidente sufre un extraño ataque, a Jean le devuelven temporalmente el derecho a trabajar y a hablar más de 100 palabras al día, con el objetivo de que continúe investigando la cura de la afasia, un extraño trastorno de una parte del cerebro que controla el lenguaje.

Pronto Jean descubrirá que la están utilizando y que ha pasado, sin saberlo, a formar parte de un plan mucho más grande, cuya intención no es encontrar la cura de la afasia, sino inducirla. ¿El objetivo final? Eliminar por completo las voces de las mujeres.

Opinión personal:

Lo cierto es que no conocía esta historia hasta que hace unos meses algunos compañeros blogueros fueron recibiendo galeradas de este libro y en cuanto leí su sinopsis, muy en la línea de El cuento de la criada, al ser ambas distopías feministas, tuve claro que tenía que figurar entre mis lecturas del mes de febrero. Hay que agradecer a la editorial que apueste por historias como esta, que creo que son muy necesarias, y más en los momentos de retroceso de derechos que se están viviendo en algunos países y los movimientos y partidos que apuestan abiertamente por una vuelta al pasado. Es curioso el título en inglés de la novela.

El nuevo gobierno de los Estados Unidos ha instalado a todas las mujeres pulseras que controlan las palabras que pueden decir al día, en concreto cien como máximo, y quien sobrepase ese límite recibirá una importante descarga eléctrica. Jean tuvo que abandonar su trabajo debido al nuevo régimen para dedicarse por completo a su familia, por lo que cuando el hermano del presidente sufra un extraño ataque y sea contratada para investigar la cura de la afasia, sabrá que la están utilizando no para curar la afasia, sino para inducirla y eliminar por completo la voz a las mujeres.

Este libro cuenta con una protagonista con una gran fuerza que tiene que aguantar ser sometida para proteger a su familia. Así, al igual que todas las mujeres, con el nuevo gobierno y sus principios religiosos, tuvo que dejar su trabajo para ser ama de casa, donde no solo tiene que cuidar de sus hijos, sino que también tiene que enseñar a su hija pequeña a que no sobrepase el límite de palabras diario, muy en contra de sus creencias, totalmente contrarias a la nueva dictadura. 

Cuando Jean sea elegida para volver a trabajar, investigando la afasia, un trastorno del cerebro que controla el lenguaje, su inteligencia hará que no tarde demasiado en descubrir que forma parte de un repulsivo plan que busca que la sociedad vaya más allá y se deje a las mujeres sin voz, arrebatándoles las pocas palabras que tienen. Por ello, no piensa quedarse de brazos cruzados, sobre todo porque ese no es el mundo que quiere para su hija ni para las demás niñas. 

El mundo que presenta este libro es sumamente terrorífico de lo real que parece, pero un mundo que me ha fascinado ver reflejado en el libro. Así, nos sumergimos en unos Estados Unidos en los que las mujeres tienen prohibido leer, no pueden trabajar, tienen el límite de cien palabras diarias que ya he mencionado y dependen en todo lo económico de sus maridos o figura masculina más cercana. Esta ha sido precisamente la parte que más he disfrutado del libro, el que se nos explicara cómo se había llegado a una sociedad así, cómo funciona y la rabia de la protagonista ante un mundo tan machista y retrógrado. Sin embargo, conforme va avanzando la trama de la investigación, creo que la historia ha perdido algo de fuerza, o lo más probable, que esa trama me interesase menos que el cómo se nos iba introduciendo en el mundo distópico, y ese es el por qué de que la puntuación final de la historia no sean cinco estrellas.

En resumen, Voz es una distopía feminista que nos muestra un mundo muy cruel y machista de forma muy realista, tanto que asusta, pero en el que disfrutamos de la valentía y rabia de su protagonista y de cómo se desarrolla la historia.

4,5/5