Reseña: Saltaré las olas

Título: Saltaré las olas

Autora: Elena Castillo

Editorial: Titania

Fecha de publicación: 19/03/2018

Saga: -

Páginas: 288

Precio: 13,00€

Sinopsis:

Imogen necesita alejarse de la persona que ha roto su corazón y de una familia que piensa que no es capaz de cuidarse por sí sola, desea comenzar de cero. El problema es que no sabe cómo hacerlo porque se ha dado cuenta de que en verdad no se conoce a sí misma. 

Por ello, su mejor amiga lo organizará todo para llevarla consigo hasta Irlanda, donde le espera su primer puesto de trabajo en una residencia clínica como enfermera y una habitación de alquiler en una preciosa cottage a los pies de los acantilados de Howth, que compartirá con un joven pescador.

Nadie en el pueblo esperaba que Liam regresara después de tanto tiempo, pero él también se sorprende cuando al llegar se encuentra con que su familia ha metido a una inquilina en su casa. 

Mientras Imogen irá descubriéndose poco a poco con su “lista de nuevas experiencias”, su misterioso compañero de casa se volcará en ayudarla a conseguir todos sus retos, terminando por poner a prueba los sentimientos de su corazón. 

Tres pacientes con mucho que aportar, un club de lectura con algo de magia y una amistad inquebrantable, enseñarán a Imogen que en la vida solo hay que saltar las olas. 

“La mejor forma de curar un corazón es rescatar a otro” 

Opinión personal:

Elena es una autora que me encanta desde que la descubrí con Como caído del cielo, para posteriormente leer sus dos novelas publicadas con Titania hasta la fecha, Soundtrack. La banda sonora de nuestras vidas y La probabilidad del unicornio, con las que acabó de ganarme. Por eso, cuando anunció la publicación de este libro, poco menos de seis meses después de La probabilidad del unicornio, fue una auténtica alegría, ya que podría leer dos de sus libros en menos de medio año, además de que esta historia prometía mucho drama, del que me gusta. La portada, aunque se diferencie de las otras portadas de los libros de la autora publicados con Titania, es preciosa, tanto que creo que es mi favorita.

Imogen necesita empezar de cero, y animada por su mejor amiga, decide viajar a Irlanda, donde conseguirá su primer puesto como enfermera en una residencia clínica. Allí, tendrá que compartir piso a los píes de un acantilado junto a un joven y enigmático pescador. Liam acaba de regresar al que fue su hogar y lo que menos esperaba es que su familia hubiera metido una inquilina en su casa. Juntos, irán descubriéndose y compartiendo sus respectivos pasados que parecen no ser capaces de dejar atrás, pero pronto tendrán que tomar decisiones difíciles que les enseñarán que hay diferentes formas de vivir. 

Como mencionaba, nos encontramos con dos protagonistas rotos por un pasado duro que todavía les persigue y que no son capaces de dejar atrás, sobre todo en el caso de Liam. Al igual que sus libros anteriores, Elena nos permite conocer a sus personajes a la perfección, mostrándonos todo lo que sienten, sus miedos y sueños, por lo que os encontraréis con personajes cercanos al lector y muy profundos, algo que provocará que casi experimentéis las mismas sensaciones que ellos van experimentando. Pero, además, son personajes que evolucionan a lo largo de la trama, debido principalmente a lo que tienen que vivir y lo que van descubriendo el uno del otro. 

"Ya te lo dije una vez, la vida es un lienzo sobre el que pintar. Tú decides con qué pinturas y qué quieres plasmar. La vida puede empezar una y otra vez, incluso hoy, aunque duela".

Pese a que Imogen no ha tenido que vivir experiencias tan trágicas como Liam, sí que necesita empezar de cero y alejarse de todo lo que le impide dejar atrás su pasado para poder vivir de nuevo, sobre todo superar su ruptura amorosa. Cuando conozca al pescador, percibirá todo el dolor que este siente e irá descubriendo poco a poco por qué un día se fue y ha regresado años después, muy diferente a cómo se fue.

Liam es un personaje que os conmoverá mucho en cuanto conozcáis su historia personal y todo lo que ha tenido que vivir pese a ser todavía joven. Me ha encantado el que no conozcamos su historia desde el principio, sino que la descubramos ya a mitad del libro, cuando ya vemos cómo es y sí, cuando ya nos hemos enamorado de él, porque es una de esas personas necesarias. Eso sí, Liam sigue roto y eso puede hacer que no viva todo lo que le sucede con la misma felicidad que los demás, que no disfrute de la vida, algo que podría cambiar.

"Pongo mi cuerpo a merced del viento y que sea el mar quien me guíe hacia un nuevo puerto".

Nos encontramos con un libro que nos atrapa desde el primer capítulo, por lo que tiene un ritmo adictivo, pero del que tengo que destacar que la historia de amor no es de esas a las que estamos acostumbrados, sobre todo en literatura juvenil, en las que todo pasa con rapidez, de esas que detesto, sino todo lo contrario, y eso es algo que se da en todos los libros de la autora. Por lo tanto, la historia de amor tiene un desarrollo lógico y lento, lo que sumado a unos personajes imperfectos, hace que sea una historia de amor coherente y realista, de esas con las que disfrutamos y nos conmueven. Y ya si sumamos la delicada y bonita prosa de Elena, tenemos un libro del que es imposible no tener un gran recuerdo.

En resumen, Saltaré las olas nos presenta una historia de amor dura y bonita, en la que os encariñaréis de sus personajes y que os enganchará desde el primer momento. Os animo a leer a Elena si todavía no lo habéis hecho, sobre todo sus libros con Titania.

5/5