Título original: The Only Child
Autor: Guojing
Editorial: Pastel de Luna
Fecha de publicación: 11/2016
Saga: -
Páginas: 108
Precio: 19,85 €
Sinopsis:
Aburrida y sola en casa, una niña pequeña decide ir a visitar a su abuela. Por desgracia, se queda dormida en el autobús y se pasa la parada, perdiéndose en el bosque.
Afortunadamente, nuestra tierna protagonista es rescatada por un misterioso ciervo que le transporta a un extraño y onírico mundo. Al contrario que Alicia, que desciende por la madriguera, ella ascenderá a este maravilloso país atravesando las nubes. Pero su familia queda muy lejos… ¿Podrá volver a su hogar?
Una obra bellísimamente ilustrada, a medio camino entre libro-álbum y novela gráfica que va directa a convertirse en un clásico.
Opinión personal:
Cuando Boolino me ofreció reseñar este libro, tuve algunas dudas sobre hacerlo o no, principalmente porque no suelo leer novelas gráficas. Sin embargo, me llamó mucho la atención esa portada y la sinopsis del libro y pensé en darle una oportunidad, porque así mi primera novela gráfica sería una que parecía irradiar dulzura y sensibilidad en sus imágenes. Además, también hay que destacar que es un libro bastante conocido y aclamado, nada más y nada menos que el New York Times habla de él como el mejor libro ilustrado. La portada es una ilustración de las que encontramos en el interior.
Esta reseña va a ser algo diferente y más breve, puesto que al ser una novela gráfica no encontramos tantos elementos.
Una niña pequeña se encuentra sola y aburrida en casa cuando tiene la brillante idea de visitar a su abuela, pero todo se torcerá cuando se quede dormida en el trayecto en autobús y despierte sin saber dónde se encuentra, se pierda en el bosque. En el momento en el que se encuentra más asustada, aparece un ciervo que la transporta a un mundo muy diferente y fascinante. A pesar de la grandiosidad de ese mundo, nuestra protagonista solo desea poder volver a su hogar, ¿lo conseguirá?
Junto a la belleza y sensibilidad de las ilustraciones, lo que más me ha cautivado de este libro ha sido su protagonista. Pese a que no encontramos diálogos y no podemos conocerla a través de las palabras, el autor le da un rostro muy expresivo, donde podemos ver la gran ternura e inocencia que la caracterizan. También me ha encantado el ciervo, me ha parecido un personaje muy protector y visualmente es precioso, como todos los personajes que aparecen.
En cuanto a ritmo, hay que decir que esta historia no es que se lea en poco, es que se devora. Creo que la leí en menos de una hora, porque al contarnos la historia a través de ilustraciones y no contener diálogos, se hace corta. Os animo a que la leáis si queréis una lectura entretenida y con gran dulzura y belleza visual.
En resumen, Hija única es una novela gráfica que, a través de ilustraciones preciosas, nos muestra el viaje de una tierna protagonista y donde se tocan múltiples sentimientos a través del elemento visual.
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